Hoy 26 de Enero se celebra el «Día Mundial de la Educación Ambiental», que se trata de un proceso dinámico y participativo, que busca despertar en la población una conciencia que le permita identificarse con la problemática ambiental tanto a nivel general (mundial), como a nivel específico (medio donde vive).
Los principios de la educación ambiental se establecieron en el año 1975, con la publicación de la “Carta de Belgrado“, en el que se definían las metas, objetivos y principios de la educación ambiental. Desde entonces el mundo ha cambiado enormemente, y queramos o no estamos ante una nueva revolución, no de carácter industrial, sino digital, el “Big Data”. Vivimos en una sociedad “hiperconectada” a dispositivos que nos bombardean constantemente con información de todo tipo.
Ya el mundo no se concibe sin un smartphone, tableta u ordenador. Antes la información tenía unos cauces de entrada definidos como la prensa escrita o la TV, pero actualmente las redes sociales y los blogs son la principal vía de contacto. Las empresas de marketing lo saben, y las utilizan para aumentar sus ventas. Pero también se pueden aprovechar desde el punto de vista educacional y de concienciación ambiental. La Educación Ambiental ha encontrado en las Redes Sociales una nueva vía para llegar a más gente y poner en contacto a los profesionales del sector con el fin de avanzar con los tiempos, comunicar y concienciar a la población de una forma más cercana y accesible.
Es necesario comprender el grado de importancia que tiene la cultura ambiental para proteger y conservar nuestro planeta, por lo tanto la educación debe ser en todos los niveles sociales, sin excepción de personas.
Meta de la Educación Ambiental
La meta de la educación ambiental según la “Carta de Belgrado”: Formar una población mundial consciente y preocupada con el medio ambiente y con los problemas asociados, y que tenga conocimiento, aptitud, actitud, motivación y compromiso para trabajar individual y colectivamente en la búsqueda de soluciones para los problemas existentes y para prevenir nuevos.
Objetivos de la Educación Ambiental
Estos son los objetivos de la educación ambiental adaptados a nuestros días, entendiendo, no obstante, que la permanente evolución de los enfoques teóricos y el replanteamiento de las prioridades de acción pueden exigir, en un futuro, la incorporación de nuevas metas. Contribuir a la construcción de un nuevo modelo de sociedad basado en los principios de la sostenibilidad. La educación ambiental debe ser un instrumento en favor de una forma de vida sostenible.
Apoyar el desarrollo de una ética ambiental que promueva la protección del medio desde una perspectiva de equidad y solidaridad. Ampliar la comprensión de los procesos ambientales en conexión con los sociales, económicos y culturales. Favorecer el conocimiento de la problemática ambiental que afecta tanto al propio entorno como al conjunto del planeta, así como de las relaciones entre ambos planos: local y global. Capacitar a las personas en estrategias de obtención y análisis crítico de la información ambiental.
Favorecer la incorporación de nuevos valores pro-ambientales y fomentar una actitud crítica a la vez que constructiva.
Fomentar la motivación y los cauces para la participación activa de las personas y grupos en los asuntos colectivos, y potenciar el sentido de responsabilidad compartida hacia el entorno. Capacitar en el análisis de los conflictos socioambientales, en el debate de alternativas y en la toma de decisiones, individuales y colectivas, orientadas a su resolución.